Audi ha presentado Travolution, un nuevo proyecto de apoyo en carretera que se encuentra ya en pruebas.
El asunto parte de la idea de instalar pequeños emisores en cada semáforo, que se encargaran de mandar por señal inalámbrica la frecuencia y patrón de cambio de las luces de control de tráfico.
Por otro lado, un receptor integrado dentro del ordenador a bordo del coche, interpretará la señal y avisará al conductor del tiempo que falta para que la luz se ponga en verde. Al mismo tiempo, el aparato calculará la velocidad ideal a la que se debe reducir o acelerar, para conseguir gastar el mínimo combustible posible en esto de tener que parar y arrancar en cada esquina.
Aparte de la evidente carga ecológica del invento, hay que tener en cuenta la aportación a la fluidez de la conducción que plantea el nuevo invento de Audi. Cada vez más, los fabricantes de automóviles centran su esfuerzo en limar las pequeñas asperezas de la conducción que hasta ahora eran imprevisibles y bien podían arruinarte la mañana.
Con ideas como el Travolution funcionando en las ciudades y un buen GPS, a ver quien se atreve a culpar a Dios, el Karma o el Universo en general de la mala suerte en la carretera, pues cada vez existen menos elementos aleatorios que contemplar.
Ésto confirma que en el futuro funcionamiento de los autos, será impresindible el uso del gps. Recuerdo hace poco un Mercedez Benz que utilizaba el gps para la dirección de los faros.
Fuente: Gizmos.es
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